Banda de Las Angustias

BANDA DE CORNETAS Y TAMBORES DE LA COFRADIA DE NTRA SRA. DE ‘LAS ANGUSTIAS’ Y SOLEDADAD

Publicada año 2000

-Hace cinco años no había banda en esta cofradía, y hoy Las Angustias vuelve a cobrar todo su antiguo esplendor gracias al trabajo de muchos de sus miembros que han ido poco a poco sacándola adelante.
‘La Bañeza Hoy’ se acercó, ahora que está tan próxima la Semana Santa, a hablar con una de las Cofradías de más arraigo en La Bañeza, la de ‘Las Angustias’ y nos encontramos con su juez y el director de su jóven banda de cornetas y tambores, un hombre que a pesar de que no es músico lleva toda la vida tocando con bandas.
Francisco Martínez de la Torre es un hombre modesto que se acercó a la Cofradía cuando no tenía banda y con un importante trabajo ha lo-grado que al día de hoy 45 jóvenes hayan sacado adelante varios temas musicales. Dice que esto es un poco más difícil, porque trabaja con niños, pero que todo sea por el bien de la Semana Santa y el que no se pierdan las tradiciones.


“Este hombre se ha estado desviviendo” comienza diciendo David González Falagán, Juez de la Cofradía de Las Angustias hablando de Francisco Martínez de la Torre, el director de su banda de cornetas y tambores, una banda mucho más jóven que la de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno en la que nos encontramos con muchos niños de 8 y 12 años.

“No tenemos límite de edad aquí puede tocar todo el mundo que quiera, aunque se ha visto que la gente un poco más mayor se va un poco más hacia la otra banda. Será por el estilo, será por la forma de tocar, o por lo que sea. Nosotros nos hemos quedado prácticamente con los niños un poco más pequeños. Peleamos con ellos e intentamos hacerlo lo mejor posible dentro de las posibilidades que hay con los niños” nos dice Francisco Martínez, director de la Banda de Las Angustias, a la vez que nos comenta que el primer año que empezaron (hace cinco años que resurgió la Banda de Las Angustias) comenzaron con 30 miembros.

EVOLUCION

“Empezamos treinta, llegamos a ser casi sesenta, y ahora estamos unos cuarenta y cinco miembros en la Banda de Cornetas y Tambores”, explica Francisco.
“Empezamos con unas cornetas y hemos ido prosperando. Hemos comprado cornetines con dos tonos y ahora también tenemos cornetines de dos pistones con cuatro pistones y vamos haciendo segundas voces, pero poco a poco porque con los niños esto va a fuerza de oído y de repetírselo.
A veces tienes que parar un poco porque para ellos esto tiene que ser un poco un juego, porque si no se cansan, se aburren, y no te atienden. Y ahí estamos, peleando intentando hacerlo bien.

REPERTORIO

“Yo he intentado adaptar las canciones que yo oía cantar de pequeño, en las procesiones, a los instrumentos que tenemos. Tocamos el himno nacional, la Marcha Real, y después en el Corpus Cristi tocamos ‘El Bendito’, una cosa muy popular. Hemos sacado la Marcha Triunfal de Verdi también, con arreglos, porque todo son arreglos que yo hago para que se puedan interpretar dentro de las posibilidades de los niños. También tenemos en el repertorio ‘El Himno de la Alegría’, y después tenemos otras cosas compuestas por mí unos trozos y otros trozos son arreglos de esas canciones populares que hablamos que yo oía cantar, y que a mí me resultan más entrañables en la Semana Santa de La Bañeza que otro tipo de repertorios más anda-luces, que me parecen muy respetables, una opción muy buena, pero a mí, sinceramente, me gusta más el estilo más serio de aquí. Por eso he intentado adaptar canciones nuestras. Tengo aquí una canción que la he titulado ‘Soledad Salvame’ que en realidad es el ‘Salvame’, el ‘Salvame Virgen María’, lo que pasa que yo hago unas introducciones y unos finales para que no quede eso tan corto. Y es que antes, cuando la gente lo cantaba era un poco más largo, pero musicalmente sólo se quedaría algo corto y sería muy repetitivo, por eso yo hago una pequeña introducción meto el tema en el centro y después hago un pequeño final.

Tenemos otra canción que hemos titulado ‘Dueño de mi vida’, como comprenderas todo son canciones que se cantaban. Después hay otra que hemos titulado ‘Virgen de las Angustias’. Es una composición casi por entero mía que la hemos titulado así en honor a la cofradía
.
Tenemos otra composición que la hemos titulado ‘Currito de la Cruz y perdona a tu pueblo’, que son dos cosas empalmadas. El ‘Currito de la Cruz’ es porque es una melodía que yo oí en una película que creo que todos hemos visto que es ‘Currito de la Cruz’. En una parte de la película sale una banda tocando en una procesión. Yo oí aquella melodía y se me quedó enganchada, me gustó. Y con eso hice un trozo y como quedaba un poco corto lo empalmé con ‘Perdona a tu pueblo’.

Después también tocamos una versión que hice yo de la ‘Saeta’ de Joan Manuel Serrat, que es conocida por todo el mundo, otra que es la Salve Rociera, y tenemos aquí marchas un poco más movidas para pasacalles como ‘Las Corsarias’, ‘La Marcha Triunfal de Verdi’, ‘La Malagueña’. Tene-mos una canción que es de corte militar que nosotros la hemos adaptado al Santo Potajero: “Santo Potajero, lléname el puchero, llénamelo más, que está por la mitad”, coincide mucho con una canción militar y lo hemos adaptado un poco con las cornetas, en plan simpático más que otra cosa, para el miércoles.

CINCO AÑOS DE BANDA

La Cofradía de Las Angustias sólo hace cinco años que recuperó la banda. “Hace cinco años, que fué cuando yo me hice cargo de la actual banda esta gente no tenía nada. Parecía que las procesiones de La Bañeza se iban un poco abajo. Y entonces esta gente se puso en contacto conmigo. Me dijo enseñas a los chicos, compramos unos instrumentos, y hacemos una pequeña banda para por lo menos acompañar un poco en las procesiones” explica Francisco Martínez cómo se fundó la banda.

Francisco Martínez de la Torre, el director de la banda de la Cofradía de Las Angustias, es un hombre modesto y sencillo que cuando le preguntamos –después de todo lo que nos ha contado– a ver si es músico nos responde “No es mi profesión. Llevo toda la vida tocando en orquestas, en bandas de música, pero no es que sepa componer. Yo me apaño para estas cosas”.

LA OTRA BANDA

“La otra banda se formó el mismo año” –explica refiriéndose a la de Jesús Nazareno, hablando de que “entre todos parece que hemos sacado un poco adelante a la Semana Santa bañezana, y en eso estamos, intentando apoyar a la cofradía y que las cosas salgan adelante. Luchando un poco con los niños, que al fin al cabo son ellos los que tienen todo el mérito, porque si ellos no pusieran un poco de su parte, por mucho que yo quisiera hacer, no haríamos nada”.

La banda de Las Angustias ensaya dos días a la semana “porque los niños el que no va a fútbol va a kárate o va a otra cosa, y por eso tienes que intentar buscar huecos en sus horarios. Y después al ser niños muy pequeños tampoco puedes ensayar muy tarde, tiene que ser a las ocho de la tarde, porque sino los padres no les dejan. Así que ensayamos de ocho a nueve y media los martes y los sábados. Los sábados ensayamos más pronto, a las cuatro de la tarde. Hemos intentado poner más días, pero los niños no te acuden porque tienen otras actividades, otras cosas”.

SALIDAS

“Hemos salido siempre en verano a tocar a un pueblo, a Villaestrigo, en sus fiestas patronales, en la procesión. Tampoco hacemos muchas salidas porque pasando el Corpus los niños se van de vacaciones a los pueblos con los abuelos, etc. Luego, en verano comienza la piscina.. Nosotros el primer año in-tentamos ensayar en verano pero veníamos cuatro a ensayar pero no acudían, así que ahora cuando pasa el corpus –que es la última procesión que hacemos en La Bañeza– les damos vacaciones. Si surge alguna cosita en verano como lo de Villaestrigo nos ponemos en contacto con ellos, nos reunimos un poquito antes, hacemos un pequeño ensayo y se va a hacer alguna cosa, pero sino no porque no hay continuidad, y hasta que no empieza el curso ellos no se sitúan.

Cuando comienzan el curso ellos ya se sitúan. ‘Tengo estas clases, tengo este horario. Tengo que ir a judo, tengo que ir a lo otro’ entonces yo procuro, entre todos, decir qué día os va mejor ‘el martes’ ‘el miércoles’. Busco la forma en que cada día al en-sayo puedan acudir el mayor número posible para poder avanzar, pues si te faltan muchos al siguiente día vas a tener que volver a hacer lo mismo”.

INSISTENCIA

“Sacamos las canciones a base de insistir e insistir y a fuerza de repetírselo y repetírselo, porque los niños no saben música. Entonces yo se lo voy tocando y les digo ‘vosotros tenéis que hacer esto mísmo’. Y así sacamos las canciones. No hay ningún otro secreto ahí.
En este punto de la conversación David, el Juez de la Cofradía de ‘Las Angustias’ vuelve a intervenir elogiando la labor de Francisco, al que se refiere como “uno hombre que tiene mucha paciencia enseñando a los niños”. David nos explica lo duro de los ensayos, en los cuales dicen pasar mucho frío. David dice que la banda la ha hecho Francisco, hecho que es una gran labor y que tiene mucho mérito que a veces no se le dá. “Este hombre se está desviviendo y nosotros desde la Cofradía le hemos ido comprando lo que hemos podido para ayudarle con la banda. Lo que va pidiendo él de una manera o de otra se lo vamos dando para que vaya completando la banda de cornetas y tambores, y yo le agradezco mucho su labor.”

INICIOS

La Banda de la Cofradía de Las Angustias empezó con 30 miembros, 15 cornetas y 15 tambores.
“Empezamos en febrero y de una forma muy precipitada” –nos explica su directro, Francisco Martínez de la Torre. “Se ensayó muy poquito y había gente que dudaba del éxito, que no se atrevían a sacar a los niños a la calle. Pero yo echándole un poquito de valor a la cosa me atreví. La verdad es que fue un poco arriesgado. Pero yo empujé un poco y dije ‘ si hemos llegado hasta aquí vamos a salir a la calle y que sea lo que Dios quiera’. Y la verdad es que tuvimos un poco de suerte. No salió la cosa mal del todo, y se fue saliendo adelante. se creo una base para que la demás gente se animase a apuntarse no sólo a mi banda, sino también a la otra. Yo soy un poco entusiasta de la música y si vienen a la banda mía bien, pero si van a la otra también bien. Después el segundo año tuvimos un boom, llegamos a ser 57, pero después como todas las cosas, que se inflan y se desinflan, y ahora ya nos hemos establecido en 45 ó 48 miembros, que creo que no está mal”.

“Hay quien se ha ido borrando y hay quien ha ido incorporándose, pero ahora tienes una ventaja, que quien se incorpora toca al lado de alguien ya sabe. Yo el primer día que llegué allí nadie sabía coger unos palillos y unos tambores ni sabía hacer sonar una boquilla. Era complicadísmo aquello. te encontrabas con niños de 6 y 8 años y había que decirles ‘mira, hay que hacer así’. Era una labor de enanos. Y a base de insistir e insistir hemos conseguido esto.

CURIOSIDAD

“Muchos de los niños empezaron por curiosidad. Tengo muchos niños que se han apuntado y se han borrado. Pero yo tengo un lema desde el primer día y es que la puerta está abierta para entrar y para salir. Lo que no quiero y siempre le digo a los niños ‘vosotros aquí mal a gusto no estéis. Si tú estás aquí y te cansas, si esto ya no te gusta y te aburres dime: oye Paco borrame y tan amigos’

Mejor eso que estar aquí de mala gana pegando cuatro chiflatazos estropeando el trabajo de otro que a lo mejor lo está haciendo con interés y con ganas y con buena voluntad.”
“Yo he procurado tratar a todos con el mismo rasero, aunque hay quien lo hace mejor y quien lo hace peor. A quien prospera más rápido se le da un papel un po-quito más complicado, porque ves que es asequible para él, y otro a lo mejor sigue tocando sus cuatro notas, porque les cuesta un poquito más el ir avanzando, pero sin desmerecer a nadie porque toquen más o menos.

Yo procuro que se sientan importantes todos, tanto el que hace cuatro notas como el que hace veinticuatro. Yo siempre digo ‘estas 24 notas suenan bonitas gracias a los que hacen esta 4. Estas 4 hay que hacerlas bien, porque sino falta algo’. Entre todos juntos logramos que suene bien o suene mal, y la gente cuando nos juzga no va a decir ‘el tercero de la 4ª fila lo hacía mal’. La banda no se analiza uno por uno sino en conjunto. Todo el trabajo de todo el mundo es importante y todos quedamos bien o todos quedamos mal” concluye Paco pidiendo un poco de apoyo a los padres para que animen a los niños.

“Hay niños que van, están 4 días allí y se van. Un niño le das una boquilla y ve que aquello no es tan sencillo se desanima. Y ahí pediría a los padres que apoyen y animen a los niños, porque esto no es tan sencillo como parece.”